BELIANA F.S. 7 DERROTAS CONSECUTIVAS

Partido perdido ante un rival directo con un tiempo para cada equipo, falta de profundidad ofensiva, y despistes defensivos crean dudas en los locales.
NACIONAL B, JORNADA 17
DEPORTES STADIUM BEL-LIANA 2 /UNIVERSIDAD DE ALICANTE.F.S. 5
KIKI, OSCAR.R, VIDAL (1), AROCA, PALERO (1), JOSE JUAN, PABLO, OSCAR H, JOSE.M, CARLOS
Este fin de semana el Deportes Stadium se presentaba en su cancha con nuevo entrenador, muchas bajas, y renovadas ilusiones, pero con idéntico resultado al de las últimas semanas, derrota ante un rival directo.
La salida del equipo local era con prudencia y queriendo hacer bien las cosas para no tener que remar contra corriente durante todo el partido, pero como los planes nunca salen como uno quiere en el minuto dos de partido una internada por banda derecha de los Alicantinos propiciaba un uno contra uno contra Kiki que veía perforada su meta en disparo cruzado.
Tras unos minutos una situación similar provocaba el segundo tanto en contra, resaltar que los dos tantos se producen con la defensa colocada lo que induce a pensar que la colocación de la misma no era la adecuada, ante este panorama los locales tienen que salir buscando la presión y esto provoca la inoperancia atacante de la Universidad, pero la local era todavía mayor, sin profundidad, y casi sin tiros a puerta el partido moría ante la falta de calidad que en este momento daban los dos equipos, antes de finalizar esta media parte los Alicantinos machacaban de nuevo el marco Villenense, y en los últimos segundos Vidal de doble penalti provocado por Oscar recortaba y daba esperanza al Bel-liana.
En la segunda mitad se ajusta la defensa y se modifica la forma en la que atacar al rival, y el partido cambia de dominador se juega más fluido, se llega con claridad y se intenta una y otra vez, pero en el intercambio de golpes solamente se llegó al 5-2 definitivo, que a todas luces fue insuficiente.
Capitulo a parte fue la actuación siempre difícil arbitral, por la cual por supuesto no se pierden partidos pero sí que pueden desquiciar a más de uno y quizás algún día nos pueda llevar a alguna acción desafortunada, creo que los jugadores deben de tener más prudencia para salvar estos ríos turbulentos que tanto daño hacen al deporte.